DECLARACIÓN DEL ARTISTA

Soy un pintor abstracto francés. En mi trabajo hay dos corrientes separadas: abstracta e interactiva.

En mi trabajo abstracto, tengo dos series diferentes.

En la serie "El amor siempre vuelve a ponerse de pie", deconstruí la palabra AMOR en líneas y círculos en una variedad de permutaciones. Sin embargo, como la "E" del amor aparece en la parte inferior derecha de cada cuadro con consistencia y estabilidad, sirve como recordatorio de que, como el sol en un día de niebla, el amor siempre está presente incluso en medio de las dificultades.

En "Danza de los Opuestos", sigo experimentando combinando formas geométricas y orgánicas, pero esta vez sin las limitaciones de palabras o letras. Reunir energías opuestas (geometría versus orgánica) en una composición y lograr ese punto de armonía y equilibrio presenta para mí un desafío formidable y emocionante. En "Danza de los Opuestos", también experimento con la técnica del estampado como un nuevo enfoque para aplicar tinta con alcohol, lo que me permite profundizar en las formas geométricas y al mismo tiempo crear un contraste visual con el aspecto más fluido del medio.

Mi segunda área de concentración es el arte interactivo. Hice una serie llamada "Re-Crear". “Re-Crear” se inspiró en mi deseo de ayudar a otros a desarrollar sus propias habilidades creativas y de juego. Se anima al espectador a mover diferentes formas sobre un fondo magnetizado en un número infinito de combinaciones para crear su propio diseño original. El arte evoluciona desde una producción fija definida hasta una experiencia dinámica, lúdica, creativa y transitoria.

Pintar una imagen, ya sea abstracta o interactiva, es un proceso tumultuoso y misterioso y, en ocasiones, notable. Este abrazo con la vida y sus misterios siempre me conecta con las palabras de Henry Miller….“Pintar es amar de nuevo”.